Cambio.- Un grupo de vecinos de la Central Campesina Norte tapió ayer con ladrillos y cemento la puerta de ingreso a la Comuna Tunari (subalcaldía) porque hace meses no se les autoriza la instalación de servicios de agua y electricidad por estar asentados en un área ilegal de un parque protegido.
“Tenemos tres puntos clave. Queremos que se anule un convenio interinstitucional que ellos han firmado y una ordenanza municipal que han sacado, además de la renuncia de la principal autoridad de la comuna”, manifestó el dirigente Celestino Sánchez.
Explicó que una negociación preliminar concertada por el subcomandante departamental de la Policía, coronel Erwin Montaño, no próspero porque los vecinos demandaban que el alcalde Edwin Castellanos se presente en el lugar del conflicto.
Los movilizados pedían las autorizaciones municipales para que se les provea de servicios de agua potable y alcantarillado, pese a que están asentados de manera ilegal por encima de la cota 2.750 del Parque Nacional Tunari.
El director municipal de Protección de la Madre Tierra, Germán Parrilla, explicó que la demanda de esas personas es inatendible porque construyeron sus casas en un área natural protegida por dos leyes nacionales.
Finalmente, en horas de la tarde de ayer los protestantes llegaron a un acuerdo con las autoridades ediles para que se analicen sus demandas, lo cual derivó en que ellos suspendan las medidas de presión que asumieron.
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